Valiente, sin autocensuras ni ultranzas, Luisa Valenzuela avanza a lolargo de varios libros que marcan un derrotero pocofrecuente.Greenwich Village, New York, fin de los a¤os sesenta. Conalgo del D.F. y de Buenos Aires. La joven Luisa Valenzuela arriba aEstados Unidos con una beca para escritores otorgada por unaprestigiosa universidad del centro del pa¡s. Tras largos meses decrudo invierno, las reiteradas alusiones de sus colegas a la muerte yel tedio provocan en ella la inesperada eclosi¢n de historias sobreseres de zonas oscuras, zonas de cat strofe, de miedo y de deseo queestallan a trav?s de su literatura como nunca antes. Y como nuncadespu?s.Bit cora de experimentaciones literarias y er¢ticas, relatoir¢nico, imp£dico, desafiante, que se resiste a las categor¡as.Novela, confesi¢n subterr nea, testamento prematuro. Los gatos de lamuerte, sus protagonistas, son despiadados agentes de la metamorfosis. Su influencia nocturna y erizada despierta la lujuria brutal de losperros de la vida, ineptos adversarios. En su disputa, estosarquetipos y s¡mbolos de muerte y resurrecci¢n se convierten en negras y blancas piezas de un juego de interpretaciones que tiene comoprimer jugador y £ltimo juez a quien se atreva a adentrarse en estasp ginas.