Este libro reconstruye la historia de los conceptos de patria y nación y sus persistentes metáforas (tierra, sangre, espíritu, alma, ser, esencia, identidad.) en la cultura cubana. El punto de partida es el discurso criollo ilustrado de fines del siglo XVIII y el de llegada son las poéticas de la historia de Orígenes. Por el camino, Rafael Rojas glosa a los pensadores fundamentales de la isla (Arango, Saco, Varela, Luz, Martí, Varona, Guerra, Ortiz, Mañach, Lezama) y enfatiza la diversidad ideológica del pasado. La nación no es, aquí, obra exclusiva de separatistas, revolucionarios y socialistas, sino también el ideal de autonomistas y anexionistas, liberales y demócratas. La cultura insular es pensada como una tensión incluyente entre sujetos y discursos y no como la exclusión o el aniquilamiento de unas ideologías por otras.