Con su primera novela, Mapa de los lugares sin nombre, la escritora estadounidense Tania James se ha situado por derecho propio entre las voces más destacadas de la floreciente literatura angloindia. Mapa de los lugares sin nombre explora con delicadeza los inevitables desajustes entre el mundo que uno hereda y el mundo que uno se construye. El resultado es una novela que Junot Díaz, ganador del Premio Pulitzer, ha calificado de «condenadamente buena». Las hermanas Linno y Anju Vallara crecen en el pequeño pueblo de Kumarakom, en Kerala. Linno tiene un talento innato para el dibujo y su hermana pequeña, Anju, es una de las mejores estudiantes de la región. Ambas sueñan con ir a Estados Unidos, y cuando a Anju le ofrecen una beca para estudiar un año en una exclusiva escuela de Nueva York, ésta aceptará sin dudarlo, pese a que ello suponga traicionar a su hermana. Acogida por una acomodada familia neoyorquina de origen indio, Anju descubrirá un mundo lleno de privilegios -y desafíos- que hasta entonces nunca había imaginado. En Kerala, Linno vivirá a su vez una notable transformación: rechazará el camino que su padre había dispuesto para ella y se valdrá del talento artístico para iniciar su propia andadura profesional. Cuando al cabo de unos meses se pierde el rastro de Anju en Nueva York, Linno pondrá en marcha un plan para intentar obtener un visado y poder viajar a América en busca de su hermana.