«¿Cómo eran vistas las mujeres por los intelectuales medievales? ¿Cuáles eran sus deberes, estilo de vida y oportunidades sociales? ¿Cómo era la mujer trabajadora en el campo y la ciudad? ¿Había mujeres artistas? ¿Cuál era la educación que recibían? ¿Cómo era la vida en los claustros monásticos femeninos? Para contestar estas y otras preguntas Eileen Power recurre con rigor y lucidez a las fuentes originales medievales, abarcando un gran espectro que iría desde crónicas, registros notariales y documentación de cancillería a contratos comerciales y estatutos gremiales. Se trata de determinar cuál era la posición de la mujer desde tres ópticas: el pensamiento medieval, su status legal y su vida cotidiana. [...] En definitiva, estamos ante un clásico que aúna como pocos textos el tradicional rigor académico anglosajón de sabor oxoniense con una amena claridad expositiva, una obra que no sólo asoma al lector a la realidad de la mujer medieval sin demagogias sino que además le brinda un recorrido por el conjunto de la sociedad del Occidente medieval». 
(Manuel Alejandro Rodríguez de la Peña)