La meta perseguida es proporcionar a los niños y niñas unos ejercicios de práctica adicional al proceso de enseñanza-aprendizaje que siguen, en sus clases ordinarias o especiales, para adquirir la habilidad lectora y a los adultos (profesores o familiares) unos materiales que les faciliten atender las necesidades de cada niño. Es decir, es un instrumento de apoyo, no un método de enseñanza. En estos cuadernos se trabajan la combinación de unidades lingüísticas, el aspecto perceptivo-visual, las habilidades fonológicas, el aspecto morfosintáctico y el aspecto semántico.