El nombre de Ovide Decroly -fundador de L'Ecole de L'Ermitage en 1907- se conserva en la memoria colectiva por la gran trascendencia de su labor educativa durante las primeras décadas de este siglo. A pesar de que no existe un título que reúna los principios y las concepciones educativas de Decroly y de la dificultad que implica el estudio de sus escritos -dispersos en revistas especializadas- la influencia de su pensamiento ha sido determinante para el desarrollo de la pedagogía contemporánea. Entre sus principales aportaciones destaca su perspectiva global de la enseñanza basada en el hecho de que la atención del niño se fija en el conjunto de las cosas antes que en las cosas de forma parcial. También son importantes los denominados "centros de interés" -propuesta pedagógica que intenta responder a las necesidades e intereses naturales de los alumnos- como "ideas-fuerza" que motivan a los estudiantes a aprender. En definitiva, se trata de una pedagogía activa que parte de lo simple para llegar a lo complejo, de lo familiarmente conocido a lo desconocido, de lo concreto a lo abstracto. En la actualidad, los "centros de interés" están presentes en la didáctica moderna y se aplican fundamentalmente en la Educación Infantil y en los primeros años de Educación Primaria. Este primer volumen de la Biblioteca Grandes Educadores es una síntesis bien documentada de la obra y la vida del pedagogo belga. En ella se interpretan con rigor y firmeza sus textos y se presenta una lista organizada de sus escritos. Una obra imprescindible para investigadores, pedagogos y psicólogos dedicados al estudio de la obra de este gran educador.