Quizá, no siempre, podamos encontrar en un libro esa pequeña chispa de magia que nos hace falta para aligerar la vida, que, reconozcámoslo, a veces pesa. Quizá, no siempre, una muchacha feúcha y deslenguada pueda alegrarnos el día. Quizá nos veamos reflejados en ella y recordemos lo dulces y lo amargos que pudieron llegar a ser nuestros días adolescentes y lo desconcertante que fue aprender a vivir. Gervasia, la protagonista del último libro de M.ª Ángeles Cantalapiedra, nace y crece en un pueblo de Toledo, casi tan pequeño y tan perdido como ella, marcada por su fealdad y el misterio que rodea su concepción. Por dentro, sin embargo, es pura fuerza, pura luz, y pronto se rodeará de una extraña familia que la arropará y le permitirá volar alto, mucho más de lo que hubiera podido imaginar, tanto que acabará viviendo varias vidas.