David Sala se adentra en la no ficción para a su abuelo, represaliado por Franco, y héroe de la Resistencia francesa

David Sala recurre a sus recuerdos de infancia para redescubrir las figuras tutelares de sus abuelos, héroes de la guerra y de la Resistencia en El peso de los héroes. El uso de lo imaginario le ofrece una distancia segura, al tiempo que reconstruye un viaje universal de aprendizaje y transmisión.

El abuelo de Sala no murió antes que Franco. Era un hombre roto, pero poseído por la determinación implacable de doblegar su línea de vida para no ser enterrado antes que su verdugo. Seis meses después de que se anunciara la muerte del 'caudillo', Antonio Soto murió plácidamente mientras dormía. Junto al piano estaba su retrato de mirada perdida, un cuadro de una tristeza terrible que había sido pintado Mauthausen por un antifascista alemán. Ese cuadro estuvo oculto y enterrado durante años hasta la liberación del campo de concentración en 1945.