Al crear, la mirada se amplía, se multiplica, se diversifica, lo creado dialoga con la persona creadora y le ofrece la posibilidad de adentrarse en sí misma para conocerse, reconocerse o transformarse. A través del proceso creativo, la disciplina arteterapéutica facilita mover las piezas del puzle que somos para recomponer aquello que se muestra roto o desdibujado.Este libro muestra obras realizadas durante cuatro años por un grupo de mujeres con fibromialgia y dolor crónico que, sin sentirse creadoras al principio, ahora son sus propias musas. Durante cuatro años las he acompañado con ilusión, caminando de la mano de la salud y de la posibilidad.Este libro muestra cómo el Arte transforma el dolor y se ofrece al servicio de la Salud. Lola Pérez, arteterapeuta y coordinadora del libro